Carrura: En la carrura, también llamada canto, se aloja la máquina del reloj. A los extremos de la misma van las asas, tratándose de reloj de pulsera; mientras que los de bolsillo tienen una saliente o espigón, denominado colgante o pendiente, en el que va la corona, cuando el reloj dispone de ella, y la anilla, a la que se sujeta la cadena del reloj. Por encima de la carrura va el bisel y por debajo la tapa, constituyendo el conjunto la "caja del reloj".
Cuando la máquina es demasiado pequeña por relación a la carrura se interpone entre una y otra un aditamento de metal o de plástico llamado bata. Aunque ahora con los movimientos de cuarzo resulta casi siempre obligado usar la bata, en el pasado se consideró un procedimiento cuasi fraudulento de vender como relojes grandes lo que en realidad no lo eran. El reloj que se muestra en la imagen lleva un calibre de reloj de pulsera (Certina 28-10), demasiado pequeño para un reloj de bolsillo, incluso de reducidas dimensiones; para salvar el inconveniente evitando el de usar una bata se opto por hacer una carrura más ancha de lo normal, incorporando carrura y bata en una misma pieza, pero estas carruras-bata reducen considerablemente la vistosidad del movimiento.
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